
Carta abierta a Fritz Perls, relatándole un viaje por Chiapas, territorio mexicano y mi
convivencia con las comunidades Zapatistas atravesando la Selva Lacandona con un
Comandante de Marcos. Expresando en el relato de esa travesía los principios del
Enfoque Gestáltico acerca de los opuestos y sus diferentes dimensiones de
comprensión.
Publicada en la revista Gestáltica Fritz Gestalt
Querido Fritz:
Me imagino te hubiera divertido enormemente estar por acá, hay tanto caos que va
encontrando su propio orden que puedo ver tu panza moviéndose de risa.
Lo roto no susurra sino que grita por su emparche, lo mal pegado muestra su evidente
incomodidad, lo tuerto reclama su derecho a ser tuerto rebelándose a la obligación de
una normalidad "ciega"; las rengueras buscan su ritmo, el amor florece muchas veces
frente al estupor de los mismos enamorados y la libertad es la invitada de honor en la
mesa de los aún vivos.
No obstante la valentía de algunos que no renuncian, muchos, a pesar de Nietzsche y tus
enseñanzas, siguen deseando "salvarse", no liberarse sino salvarse y han encontrado un
nuevo santo llamado San Marketing.
No sabemos de qué océanos son sus aguas, lo que sí conocemos de este mar es su
promesa de una vida sin peligros si te sumergís allí, distrayendo a muchos
empantanados con su fragancia artificial.
O sea Querido Fritz que está casi todo químicamente perfumado.
A tu categoría existencial de los seres tóxicos y los nutritivos bien podríamos agregar la
de los consumidores, fieles devotos del santo y los marginales, ateos por propia decisión
o falta de bolsillo.
He observado que aquellos que se sienten bendecidos por El, a poco de gozar de cierto
alivio, empiezan a estar muy ocupados, distraídos y especialmente malhumorados...
estos mismos síntomas los he notado en aquellos que desearían ser sus devotos y no lo
logran... pero éste es otro tema.
Los que llegan a un cierto equilibrio adquieren una "uniformidad objetal" que hace que
se parezcan tanto los unos a los otros como sus tentaciones a sus televisores.
Ha surgido también un misterioso arquetipo, llamado "arquetipo Disneylandia", extraña
fuerza de advenimiento contemporáneo surgida del mar de Marketing.
Yo misma ya lo había descubierto en una de mis exploraciones por la selva peruana, al
comienzo de la década del '70. Estando allí, me encontré con la sorpresa de una casa de
refugio para discípulos de este santo, cuyo hábitat en todas sus características hacía
imaginar que estábamos en la selva, es decir: la vegetación, los monos, las chozas, las
mariposas semejaban a un paraíso selvático con vegetación, monos, chozas y mariposas.
Sí, no es necesario que vuelvas a leer lo anterior, estábamos en la selva y este refugio-
monasterio hacía de cuenta lo mismo, al comienzo a mí también me pareció extraño
pero después me di cuenta que... ¡era gente tomada por el arquetipo!
Dueños de algún reinado imaginario, habían decidido tomarse unos días de descanso
"en la selva". Así fue como me toco descubrir este arquetipo y conocer su base de
existencia. ¡el Como Si!.
Como si estuviéramos en la selva, estando en la selva...
Como si vos fueras vos siendo vos...
Como si yo fuera yo haciendo de mí...
y como si todo esto no nos diera ese terror a la intemperie....
Querido Fritz, recuerdo tus Koan como flechas de palabras talmúdicas... inspiradas en
una ley de supervivencia de la especie humana...
"Mil flores de plástico no hacen de un desierto un jardín
Mil caras vacías no llenan una sala vacía"
Y no obstante el perfume artificial que inunda el aire, los gestaltistas seguimos
creciendo como gestaltistas y sabemos que...
Una flor, es una flor, es una flor...
Querido amigo ¡Cómo me acompañaste cuando nos dijiste!: "Hemos descubierto que
producir cosas y vivir en función de ellas intercambiándolas no es el sentido final de la
vida. Hemos descubierto que el sentido de la vida es que debe ser vivida y no cambiada
y conceptualizada dentro de un esquema de sistema.
Nos estamos dando cuenta que el manejo y el control no son la felicidad última de la
vida. Debemos, no obstante, darnos cuenta que hasta aquí tenemos solamente una
rebelión. Aún no tenemos una revolución. Falta aún mucha substancia. Para lograr esto
hay únicamente una manera: el llegar a ser verdadero, aprender a tomar una posición,
definirse, desarrollar el centro de uno mismo, entendiendo la base del existencialismo;
una rosa es una rosa es una rosa."
Cuando me llegaron tus palabras yo era una joven rebelde y una incipiente terapeuta
gestáltica a quien Laing y Cooper le habían enseñado que cualquier experiencia es
política.
Habiendo descartado desde el inicio el partidismo, como herramienta para descubrir el
poder, considerando esto como un obstáculo más en el verdadero asunto de asumir
responsabilidad por la propia vida, me había preguntado cómo llevar adelante mi tarea
como terapeuta, en el marco de un campo psicológico viciado de las tentaciones del
sistema. Entonces, no me sentí tan sola cuando dijiste: "Aún no tenemos una revolución,
nos falta mucha substancia. La rebelión es el primer paso y esto depende de nuestra
juventud a la que debemos siempre apoyar."
Han pasado más de 20 años y es bueno reconocer que la Gestalt mantiene su sustancia
como movimiento vivo que sigue inspirando a mucha gente aquí y allá.
En Argentina estamos trabajando juntos en AGBA y al no tener ninguna herencia por la
que pelear, sólo tenemos que enfrentarnos a nuestras estupideces de carácter y sus
adornos, muchas veces superadas por la excitación de tomar un desafío que todavía
busca su camino de realización: construir una Gestalt que nos defina como
latinoamericanos.
Fuimos formados por Nana, una gestaltista chilena que a veces dice, no sin orgullo, que
nunca ha estado en el templo gestáltico de Esalen, yo que la conozco muchísimo sé que
lo dice aludiendo a que su Gestalt no está contaminada con los vicios culturales que
podía haber tenido su formación si se hubiera dado en un lugar con los
condicionamientos específicos de pertenecer a los Estados Unidos... y su momento
histórico.
Sé que le hubiera alegrado el corazón mirarte a los ojos, compartir algún atardecer de
primavera, y las estrellas en Chiloé.
En el prólogo a la primera edición en castellano de Dentro y Fuera del Tarro de la
Basura, escribe: "Sé definitivamente que este amigo increíble es la persona que más
amorosamente me ha ayudado a crecer".
Esta fue nuestra primera maestra de Gestalt, un puente privilegiado de tu modo de
mostrarnos el derecho a estar vivos, si aún no nos tocó morir.
Querido Fritz me gustaría contarte que a veces necesito un poco de Contraste cuando
esta representación de mundo me resulta agobiante y la toxicidad del ambiente con su
fragancia artificial empieza a moverse en mi nariz como la danza turca de los dibujitos
animados... reconozco estos momentos cuando empiezo a tener un excesivo pudor en
las relaciones.
¡Un poco de Contraste, un poco de Contraste! pide mi alma.... un poco de cielo abierto,
desnudez, intemperie y Realidad Real.
Estaba en eso y recordando que había comprometido mi participación en la Segunda
Semana Internacional de Gestalt en México, cuando simultáneamente y de alguna forma
"casi secreta", llegó a mis manos un cassette con unas palabras del Subcomandante
Marcos, representante de las asambleas indígenas rebeldes de México, palabras
pronunciadas en la selva Lacandona de Chiapas y desde un lugar llamado La Realidad.
Tuve en ese momento más claridad acerca de la existencia en ese sitio de gente
trabajando por los mismos valores que vos, mis amigas gestálticas, Nana, yo y tantos
otros... entonces escuché que Marcos decía:
"Suponga usté que no es verdad eso de que no hay alternativa posible.
Suponga usté que la impunidad y el agravio no son el único futuro.
Suponga usté que no se adelgace cada vez más la raquítica frontera que separa la guerra
de la paz.
Suponga usté que algunos locos y románticos piensan que es posible otro mundo y otra
vida.
Suponga usté, lo peor, que estos locos piensan que hay otros locos que piensan como
ellos.
Suponga usté lo inadmisible, es decir, que estos y aquellos locos quieran encontrarse y
suponga usté que de este encuentro de locuras pueda desprenderse algo de razón"...
Cuando terminé de escuchar esto, de una manera muy sutil, una multiplicidad de almas
realizó una danza en mi corazón recibiendo valor, claridad y ese anhelo que viene del
amor incondicional.
Valor, claridad y anhelo del corazón, la bandeja que sostiene la intuición.
Marcos. La amistad gestáltica. Los puentes hacia La Realidad.
Me parecía razonable y necesario que yo estuviera en la selva Lacandona, entre otras
cosas por aquello que vos sabiamente me enseñaste cuando dijiste: " la rebeldía es
necesaria pero no es suficiente para la revolución."
Al acordarme de esa frase una alegre curiosidad me invadió, la palabra revolución hacía
mucho tiempo que no me la escuchaba decir... recordé la puerta de la primer casa donde
viví sola, ahí había escrito "Reforma rima con horma, revolución no rima con libertad
pero se le parece".
¿Y qué tendría que ver todo esto con la Segunda Semana Internacional de Gestalt, mis
amigas de la AGBA, la reforma de la horma y La Realidad?... La Realidad...
¿Cómo llegar allí? ¿Cómo llegar allí?
Dos días después, mi amada amiga Kita, me llama diciéndome: "Gra, llegó una carta
para vos desde México."
Querido amigo, nunca nos contaste tu darte cuenta acerca de la fuerza de los deseos. Sé
que en tus años sabios no se te pudo haber escapado la unión de las fuerzas que
intervienen en la realización de lo que pedimos de corazón... y su expresión en esa red
que se teje con los hilos del deseo del alma (lo organísmico, como te gustaba llamarlo
para excluir cualquier connotación metafísica, que llevara a un mal entendido).
Le pedí a mi amiga que me leyera la carta por teléfono y mientras iba a buscarla "supe"
que alguien desde Chiapas me "llamaba".
Era María Elena, una religiosa mexicana y tercermundista; su congregación la había
enviado a Argentina unos años atrás, a la ciudad de Viedma donde vivían con otras
religiosas en una pequeña casita, yo me había alojado allí algunas veces cuando
coordinaba mis grupos en esa ciudad.
María Elena participaba en ellos, y eso la llevó a hacer su formación en nuestra escuela
de Buenos Aires, después de esto su congregación la necesitó en México.
¿Te gustaría saber que la Gestalt se ha expandido hasta influenciar el trabajo de algunos
religiosos tercermundistas? Bueno... vos dijiste que tenías una herramienta que podía
hacer algo con sentido por la gente... y todos sabemos que los curas no son tontos.
No te pongas muy nervioso, hay buena gente allí también.
Después de La Segunda Semana Internacional en México... Sheraton, computadoras,
fax... la ternura amistosa con mis compañeras gestálticas... y algo de pasión, me fui a
Tuxtla. Avión hacia la selva.
Nunca supe ¿qué sentiste al llegar a Sudáfrica?
Tuxtla, humedad, mariposas, calor y pasión en la humedad, el calor y las mariposas. Un
abrazo sagrado con la religiosa que me esperaba en el aeropuerto, dos cuerpos
recibiendo la religiosidad de un abrazo, muchas risas desbordando en lágrimas.
"Bienvenida al conflicto", me dijo María Elena y una información silenciosa me
recorrió. Durante los últimos días me había estado preguntando ¿qué será Chiapas?
¿quién seré yo en Chiapas? ¿Adónde me está llevando este río subterráneo de almas
buscando la realización de lo mejor que hay en cada uno?
Pasado el primer día allí pude responderme.
-¿Qué es Chiapas Zapatista?
- Un Despertador Humano
Como los pájaros de Huxley que gritan en la Isla -¡Aquí y ahora!; como la primera
mona que lavó la papa, en esa lejana isla y provocó el contagio por vía extrasensorial en
otros monos de otras islas; como el escarabajo de oro de Poe; el príncipe de la Bella
Durmiente en los cuentos infantiles; el primer Satori de los que se buscan a sí mismos
más allá de las fronteras del ego; una caricia en una noche lluviosa cuando te sentís
apaleado como un perro....
Chiapas es un Despertador Humano.
Una zona de amanecer con resplandor de oscuridad, vapor de rocío extinguiéndose con
el prematuro sol; habitada por Héroes Campbellianos o sea seres en transformación,
Don Juanes despertando de miserables sueños, Cristos y Artesanos de Dios, volviendo
de sus letargos en lenguas Quiches, Tarahumaras, Paipais, Náhualtz, Cochimis,
Zapotecos, Mixtecos, Chontales, Cucupases, Popolucas, Tzotzils, Huicholes,
Quiquipacus, Lacandones... Quilihua, Yumas, Matlazincas, Huaztecos... en sus muchas
montañas, con sus muchas historias en su única selva.
Rebeldía despierta, desafiando al arquetipo Disneylandia y su vacuidad... "todos para
todos "y " todo para todos", como les gusta decir.
Más de 50 grupos étnicos que como vos decías han decidido luchar por vivir si aún no
les ha tocado morir.
Ellos dicen que desde la conquista hasta ahora fueron asesinados quince millones de sus
gentes... ¡quince millones de sus gentes!
¿Cómo juntaron suficiente inhumanidad los españoles-nazis, los alemanes-nazis y los
nazis de todos los nazis-países para hacer lo que hacen a otras personas? ¿Cómo la
juntan los japoneses, los militares argentinos, chilenos, paraguayos, guatemaltecos?
¿Cómo la juntan?... No creo que la razón pueda dar alguna vez una clave a tanta
demencia acumulada.
En Chiapas los indígenas empezaron a despertarse desde una lógica negativa, desde una
lógica del no-ser, desde una lógica de la muerte ya que su disyuntiva era seguir
muriendo por muertes absurdas, tuberculosis, paludismo, hambre, alienación... o morir
desafiando la malignidad del sistema, los indígenas zapatistas eligen el desafío y su
coraje.
El punto de vista de los habitantes indígenas de Chiapas está basado en una idea del
tiempo cíclico que alegraría el espíritu, las manos y los pies de tu inspirador Nietzsche,
ese tiempo de eterno retorno donde el pasado se presenta, tiñe el presente, se desplaza
hacia el futuro que a su vez alimenta el pasado.
En esta Danza de Opuestos temporales el aquí y ahora es atravesado por el infinito y
esto es esto, mil veces esto...
la vida es la vida, infinitamente la vida...
la muerte es la muerte aquí y ahora, en cada instante...
la muerte, esa aliada sagrada de la vida...
¿Le dirías a Nietzsche que encontré amigos por acá que tienen un calmante para sus
dolores de cabeza en esta concepción del tiempo, en el torso desnudo de las mujeres
Chiapanecas, en las mariposas de colores y en la luna presente en el cielo hasta el
mediodía... amigos que como Hércules están haciendo sus trabajos y recuperando la
Fuerza?
¿Le dirías que esta zona está llena de Maestros que nos enseñan aquello que siempre
tenemos que volver a reaprender: que no sólo de pan vive el hombre? ¿Le dirías que
aquí encontré amigos que nos recuerdan esto luchando por su pan, su techo y su tierra
para que los seres humanos no perdamos un lugar donde caminar, para que no perdamos
nuestros pasos, para que no perdamos la flor de nuestras propias palabras ¿Le contarías
que esto lo hacen despojados de todo, a pura fuerza de Voluntad de Poder, a lo
Zarathustra, con el corazón en sus manos y sus miradas de leones atravesando el
tiempo?
¿Le contarías de mi parte que en las tres transformaciones de las que él nos habló para
salir del estado de anonimato, de ser un camello viviendo la vida sólo como una carga,
los zapatistas están recuperando sus rugidos inocentes como niños, con esa inocencia
que surge desde el fondo de la tierra, con esa inocencia del que quiere nacer de nuevo
volviendo de la muerte?
¿Le darías mis saludos a Frederick?
Fui viajando metiéndome más y más adentro de la selva teniendo a María Elena como
guía... a medida que avanzaba.. todo se iba aclarando y complejizándose más... la
sustancia iba tomando cuerpo... sentía la evidencia de estar entrando simplemente en un
espacio sagrado: la recuperación del respeto y la dignidad de vivir... iba entrando en un
espacio glorioso.
La Guerra Santa, ese hermoso poema de Renée Daummal, se me iba develando a
medida que avanzaba en esa otra guerra santa, la de los indígenas chiapanecos en sus
luchas.
La cosmogonía indígena vitalizándose: el mundo de arriba, el mundo de abajo y el
mundo del medio, reencontrando sus secretas conexiones; el mundo sobrehumano, el
reino subhumano y sus representantes en la humanidad reencontrando su circulación.
La relación conmigo misma, la relación con los otros, la relación con el ambiente, como
nos enseñaste a "ver", despejándose de alienaciones y prejuicios... espiral vitalizada...
Más adentro... más arriba... y a los costados más próximos.
Se nos unió Guadalupe, una hermosa mexicana representante de los Derechos
Humanos, oriunda de Palenque...
María Elena, Guadalupe, Nalini, soldados, helicópteros, calor, camioneta, lluvia, lagos,
barro, montañas, calor, camioneta, lagos, montañas, cantos en camionetas, comunidades
de resistencia zapatistas, guardias blancas, lagos, barro, calor, cantos, comunidades,
camioneta...
El sol en el lago
la red se mueve
pentágonos...hexágonos
bailando
mi alma en silencio
las redes se mueven
... diálogos con comandantes, de comandanta a comandante, intimidad de rebeldes en
acción, pasión, campamento del ejército, 50 soldados, 5 camiones, cuatro tiendas
grandes, 2 chicas, una especie de kiosco atendido por una mujer con los labios pintados,
una tienda más grande con tres mujeres esperando a los soldados, polleras ajustadas, dos
más jóvenes que 15 años (8 dólares la noche)...
Selva, calor, humedad, silencio.
De pronto se suelta una lluvia torrencial, me pongo a bailar y los niñitos de San Pedro,
comunidad de resistencia zapatista, que me están mirando tímidamente, se empiezan a
acercar y todos cantamos y bailamos bajo la lluvia, risas, gritos, saltos.
Cada vez más despiertos y por primera vez sé que la alegría del amor no tiene opuestos.
Esta alegría que es la expresión de este amor del corazón no es ni una síntesis, ni un
encuentro ni nada, es simplemente el vapor de un corazón limpio.
Lo supe ahí con Rodulfo, Arbey, Lady, Isaac, Darinel, Ermer, Joel, Marioli, Florinda y
David, estos niñitos que tienen entre 3 y 7 años, mi banda de baile en la lluvia de la
selva Lacandona.
Mis compañeros de danza. Los Ángeles del Contraste en mi Estado Mayor.
Una alegría sin opuestos, una alegría de simplemente ser.
Cómo habrán juntado tanta animalidad para masacrar a esta gente que inventa nombres
sacados de todas las culturas, cambiando las letras, aceptando todos los juegos para
armar nuevas palabras que nombren los nombres, ya que dicen que si somos todos
distintos entonces tenemos que llamarnos de distintas maneras.
¿De dónde habrán juntado tanta animalidad? Me sigo preguntando, sin importarme la
respuesta.
Después de pasar varios días con esta gente me costaba entender la frase con la que
María Elena me recibió: "Bienvenida al conflicto", me dijo.
Conviviendo con los zapatistas no sentía que ellos estuvieran en un conflicto, no
obstante los soldados que ya han instalado sus pequeños pueblos, los helicópteros que
se hacen notar y la situación de militarización, con la violencia que eso supone.
Reflexionando un poco me pareció que era mejor utilizar lo que siempre vemos en los
grupos, en los laboratorios, lo que Nana tan magistralmente nos enseñó a ver: que el
conflicto es un invento entre dos opciones irresolubles que parten de una situación
imaginaria. Por eso llamar conflicto a lo que pasa en Chiapas es una caracterización de
la situación vista con los ojos del gobierno y difundida por los medios, quizás por su
identificación con el pensamiento militar.
El gobierno sí que está en conflicto con los zapatistas, porque ellos no desaparecen
como el gobierno quiere, pensar de esta manera implica obviamente un modo militar de
hacerlo ya que una parte quiere hacer desaparecer a otra que forma parte del organismo
todo y esto es una prepotencia; y si de lo que se trata es de la vida de personas, es una
transgresión a la ley de la vida.
Los zapatistas no son un grupo aislado que intenta tomar el poder sino parte del pueblo
mexicano que lucha por sus derechos, no pueden desaparecer sin masacre y al ser el
gobierno representante de todos los habitantes del lugar donde gobierna, podemos ver el
conflicto en el que se encuentra... y podemos imaginar su división.
Entonces realmente el gobierno está en un conflicto pero yo no vi esto en los zapatistas,
sí vi gente en un estado de transformación con toda la movilización que eso implica
pero yendo todos para el mismo lado.
Como cualquier organismo en estado de transformación los opuestos se evidencian cada
vez con más claridad, a partir de la movilización van encontrando su
complementariedad.
Marcos es Occidente, el análisis histórico, el desarrollo cibernético, la filosofía con su
búsqueda de libertad, la fuerza del tiempo, la visión de futuro. Todo esto va recobrando
su enorme valor al encarnarse en la Esperanza y al ir integrándose con las asambleas
indigenistas y el despertar de su profundo saber, un saber extendido por el amor a la
tierra, el sentido hondo de pertenencia, el agradecimiento a las semillas y un sanguíneo
sentimiento de hermandad y de comunidad.
Estas dos fuerzas, la madre y el padre; el tiempo y el espacio; el hombre y la mujer,
hermanadamente van reuniéndose en Chiapas y así los polos se van transformando y
Occidente se pone a disposición de Oriente.
Marcos se transforma en guerrero de la tribu y Oriente al recobrar su capacidad
organizativa puede reconectarse con el misterio chamánico y su respeto existencial.
"El que manda, manda obedeciendo", dicen por allí. Marcos manda obedeciendo las
decisiones de las asambleas indígenas, transformándose como hombre de ciudad,
intelectual, soltando su ego, aprendiendo lo que como occidentales no sabemos: un
sentimiento de hermandad hacia los seres humanos.
Gente en una situación de miseria extrema compartiendo un plato de frijoles y un huevo
entre muchos, muriendo de muertes absurdas y sin embargo, más ricos que casi la
mayoría de los que tienen sus bolsillos llenos.
Chiapas es una metáfora que nos muestra la diferencia entre el conflicto, que es siempre
una lucha entre diferentes partes por obtener algo que no existe, y el desafío de aceptar
la movilización que implica siempre una transformación de polos encontrando su
complementariedad, entre la existencia inauténtica y la existencia auténtica, entre el self
y el falso self.
¿Será por eso que los zapatistas no luchan contra el gobierno porque saben que lo falso
no puede ser derrotado pero sí lo enfrentan con la dignidad del que sabe que llevar luz
sobre la verdad permite salir de la ceguera?
A los zapatistas les gustan las paradojas, se cubren las caras con sus pasamontañas para
que los vean, hombres y mujeres sin caras para salir de sus nadas y decir -Acá estamos.
Acá estamos.
Las personas con las que conviví en las comunidades de resistencia zapatista eran
serenas, verdaderas, gozaban de una alegría confrontativa, no estuve con nadie violento,
con nadie fuera de sí.
Estuve con personas que despertaron al lenguaje del compromiso, sus goces y
hermosuras, hombres reconociendo nunca haber escuchado a sus mujeres y entendiendo
que la primera tarea que tienen que darse para reclamar un trato digno, es aprender a
tratar dignamente a sus mujeres...hombres viviendo con perplejidad, confusión y
valentía esta novedad que la lucha les trae.
Mujeres disponibles a salir de sus casas, de sus cocinas a leña y sus campos,
recuperando su voz y su voto para decir sus "ya basta... ya basta".
Es muy intenso sentarse frente a un indígena zapatista, comandante de un ejército
popular... y hablando del amor por su pueblo escuchar su arrepentimiento... como una
dolorosa confesión por el trato de todos los hombres a sus mujeres: "no las veíamos, no
sabíamos que estaban... no sabíamos".
La tradición de lo tzotziles dice que los hombres y las mujeres verdaderos se conocen
como plantas que alcanzan su completo florecimiento cuando encuentran sus cantos,
estos cantos llegan en sueños que son el medio para ver nuestras almas, o sea que
florecer y recuperar la propia voz, escuchársela y despertar la creación de la canción
propia es la tarea de los hombres y mujeres verdaderos... eso dicen los tzotziles.
Gente dando nacimiento a un alma nueva entre todos. Hombres y Mujeres Verdaderos
floreciendo para ver al Creador en las Aguas Eternas... ese gran espejo que son los
Sueños.
Gente lista para ir hasta el final de una experiencia, lista para ir hacia lo desconocido,
asumiendo "la muerte como consejera" para vivir más involucradamente su presente
aun cuando este presente incluya una masacre. Un salto cuántico en la conciencia del
miedo a la vida, del miedo al amor.
Querido Fritz creo que entenderías perfectamente de lo que estoy hablando. Como muy
pocos, nos diste una herramienta para reconocer esta falta de compromiso que encubre
la neurosis, su falta de raíz y su sueño autohipnótico.
Chiapas, La Realidad, eso indefinible, imposible de ser nombrado, como dice el
Tao...indefinible, podemos definir lo irreal pero no podemos definir lo real, porque lo
real no puede concluirse, no podemos tener una conclusión, pero si podemos
comprenderlo, vivirlo. Y Chiapas es una metáfora de todo esto. Una metáfora y una
realidad. Ahí están...ahí están.
Querido Fritz, me enseñaste que no era un pecado ir ahí donde intuía que podía aprender
algo, me enseñaste a entender la transgresión desde su lado luminoso: la rebeldía. Me
preparaste para el encuentro con el Gran Provocado
r, Osho, que con su invitación me
dijo: "Danza con Chiapas Nalini"...
La Realidad no puede ser explicada... puede ser vivida.
¿Si fueras un círculo podrías explicar tu redondez? ¿O solo dirías Así... haciendo un
gesto con el cuerpo, abriéndote más para mostrar tu circularidad?
En la selva Lacandona dicen: Todos somos Marcos. Yo digo: Todos estamos en
Chiapas, todos los que estamos en estado de transformación hacia un alma nueva, con
nuestros héroes, nuestros aspectos aletargados que despiertan, avanzando transformando
nuestro miedo en coraje... Todos estamos allí.
Tuve que salir de la selva por una picadura en un pie... cuando me fui de allí con la
pierna arrastrando, el corazón desbordante de amor incondicional y agradecimiento...
mis ángeles del Contraste se acercaron en fila y dándome cada uno sus manitas me
dijeron:
"Que se cuide usté bastante"...
Esa fue la última bendición que recibí en la selva Lacandona, zona de espejos, la gran
metáfora de este tiempo, un Hospital de almas, una Escuela.
Danza con Chiapas, querido Fritz.
Un abrazo de territorio
Graciela Nalini Cohen
Desde los Altos de Luz de Luna